SÍNDROME DISFÓRICO PREMENSTRUAL
El Síndrome premenstrual y el disfórico premenstrual son problemas que giran alrededor de la menstruación. Esas molestias pueden ser físicas y/o mentales y se repiten con cada menstruación; muchas veces tienden a ser progresivamente más severas e impactan de forma diferente aspectos de la calidad de vida y relaciones sociales, sexuales y laborales de las pacientes. Se calcula que un 80% de mujeres sufre molestias con la menstruación, que más o menos 30-40% sufre del Síndrome Premenstrual como tal y que algo menos del 10% sufre de la forma más severa: el Síndrome Disfórico Premenstrual.
Se han definido de forma estandarizada los criterios diagnósticos de estos síndromes por parte de sociedades médicas, con el fin de diagnosticar de mejor forma estos problemas y, más importantemente, con el fin de tratarlos tempranamente y de forma adecuada, con el fin de impactar en la calidad de vida de estas pacientes. El Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos (ACOG) ha estandarizado el diagnóstico y los parámetros físicos y mentales que debe llenar una paciente para poderla diagnosticar de Síndrome Premenstrual. Igualmente, la Asociación Americana de Psiquiatría también define en su manual DSMV los criterios que debe llenar la paciente con Síndrome Disfórico Pre-menstrual. También incluye síntomas somáticos y mentales.
Las consecuencias derivadas no solo son para las pacientes que sufren de estos cuadros clínicos, sino para el sistema económico y de salud de cada país. En Estados Unidos se ha cuantificado el impacto económico del Síndrome Pre-menstrual (SPM), determinando los costos médicos directos (demandas administrativas y honorarios) y los costos indirectos (días de ausencia laboral femenina y disminución de la productividad. Algunos expertos han afirmado que el SPM o su forma más severa, el Síndrome Disfórico Pre-Menstrual, han producido pérdidas de más de 5 mil millones de dólares anuales en los Estados Unidos debido al ausentismo y la ineficiencia laboral. En nuestro medio, podemos afirmar que las estadísticas deben ser muy similares.
Dentro de los tratamientos más utilizados y aprobados para tratar este problema está un anticonceptivo combinado que contenga Drospirenona con un esquema de administración oral 24/4 que contiene JOLIAN®. Este último controla los síntomas de forma muy eficiente, consiguiendo mejoría en la calidad de vida de estas mujeres, similar a la mejoría conseguida con los inhibidores de recaptación de Serotonina.
Es muy evidente que los síntomas y signos que aparecen alrededor de la menstruación tienen una frecuencia de aparición muy importante, de forma regular y persistente, que en un porcentaje alto de la población femenina en edad reproductiva tiene un impacto en su vida diaria y su desempeño social, familiar y de pareja. Adicionalmente un porcentaje de ellas con este problema puede ser muy severo y requerir manejo inmediato por un especialista para que los síntomas no lleven a consecuencias importantes para su estado anímico, físico y futuro reproductivo.
Ricardo Martín O. MD MSc FACOG
Director Científico